Cada vez que probamos un vino, especialmente cuando es la primera vez, de forma consciente o inconsciente realizamos una degustación. De esta forma decidimos si nos agrada o nos desagrada su sabor, si es más adecuado para una hora u otra, y si mejoraría acompañándolo de otro alimento.
Cuando dejamos a un lado la parte inconsciente y nos centramos en degustarlo para extraer toda la informa posible, es cuando estamos hablando de hacer una cata de vino.
Aquí aprenderás cómo catar vino de forma correcta, para conocer todas sus cualidades y defectos a través de tres de nuestros sentidos, la vista, el olfato y el gusto. En este orden lo observamos, lo olemos y lo saboreamos, analizándolo, juzgándolo y definiéndolo.
Desde las tres siguientes secciones vas a poder introducirte en este arte, con explicaciones que te ayudarán a entender mejor el mundo de la enología. Están divididas en la fase visual, la fase olfativa y la fase gustativa.
Como en todas las disciplinas hay distintos niveles, aquí podrás conocer los principios básicos de forma teórica, y si te gusta y quieres aprender más de forma práctica desde casa, podrás adquirir nuestro curso de cata de vinos.
Cómo aprender a catar vino
España es uno de los países con mejores vinos del mundo, pero la realidad es que no sabemos catar. El vino forma parte de nuestra cultura gastronómica y de nuestras celebraciones, pero no sabemos distinguir a vista algo tan sencillo como si es joven o reserva.
Uno de los motivos es que sentimos cierto temor, pensamos que es difícil, que sólo los expertos son capaces de hacerlo, y nada más lejos de la realidad. Cualquier persona a la que le funcionen correctamente los tres sentidos citados anteriormente, es capaz de aprender a catar vino.
Como es normal, habrá quien llegue a niveles más avanzados que otros, pero si no te quieres dedicar profesionalmente no es algo que deba preocuparte, pues nuestro curso práctico de cata está pensado para todo el mundo, desde la persona que no sabe nada de vinos hasta los que ya tienen ciertos conocimientos.
También tienes que tener claro que aún conociendo bien la teoría, si no tienes una referencia práctica no vas a poder avanzar. Necesitas tener una copa de vino delante de ti, mirarla, olerla y probarla, para acostumbrar a los sentidos a reconocer los matices.
Cómo preparar una cata
Para realizar una cata, como hemos comentado antes, lo que necesitamos son nuestros sentidos, una copa adecuada y el vino. Lo demás ayuda a afinar el resultado, pero no es estrictamente necesario si no es una cata profesional.
Para centrarnos por completo en nuestro cometido, tenemos que buscar un lugar tranquilo donde la temperatura sea agradable, y tener en cuenta los siguientes factores:
1. La iluminación
La mejor luz es la natural, si podemos preparar la cata en un exterior tranquilo a una buena temperatura sería lo ideal. Si no fuese posible, tendríamos que buscar una sala con luz blanca y paredes lo más neutrales posible, para no alterar el color del vino con posibles reflejos.
2. La ventilación
El sentido más preciso es el olfato, es capaz de reconocer miles de matices distintos, de modo que la sala tiene que estar bien ventilada y posibilidad de que se filtre cualquier olor exterior.
Así mismo, no debemos llevar perfume, ni nosotros ni las personas que se sitúen cerca nuestro.
3. Los accesorios
Lo imprescindible en una cata es una copa adecuada y una mesa blanca, o bajo un mantel blanco completamente. Si sólo tenemos una copa, sería recomendable tener agua para limpiarla cada vez que cambiemos de vino.
Hay otros elementos que ayudan aunque no son imprescindibles si no es profesional, como la escupidera si no queremos tragar el vino y los palitos de pan tostado para limpiar las papilas gustativas entre vino y vino.